25 de abril, 2024
Comercio
CONSUMO

Los avances del e-commerce en Río Cuarto

No hay cifras oficiales que permitan medir el impacto por sobre las tiendas reales, pero igual se aprecia cierta disminución en las ventas de éstas. Algunos comerciantes ya incluyen la venta a través de redes o plataformas digitales como un nuevo servicio.

En medio de una crítica situación económica el comercio electrónico (e-commerce) ganó amplio terreno en la modalidad de compra y va creciendo a pasos agigantados. Las ventas por internet son una realidad que no se puede negar y que, en cierta forma, han impactado negativamente en los locales comerciales.
En nuestra ciudad, si bien no se conocen datos estadísticos oficiales que permitan medir el impacto del e-commerce, sí se puede apreciar una disminución en las ventas físicas.
Desde la Cámara Mercantil e Informes Comerciales explicaron que los rubros más afectados son aquellos que venden productos de marcas reconocidas, como por ejemplo los electrodomésticos, dado que algunos comercios poseen plataformas digitales muy bien desarrolladas que permiten concretar ventas y luego retirar en la sucursal de nuestra ciudad. “Pero esto es una apreciación nuestra. No hay estadísticas ni datos oficiales”, aclaró a Breves Iván Safadi, titular de la Cámara. 
Al mismo tiempo, comentó que muchos comerciantes locales están incursionando en la venta por internet, sobre todo a través de las redes o también de alguna plataforma comercial, “pero estas ventas no son significativas a nivel facturación del local, aunque no dejan de ser ventas reales”.

Ventajas y desventajas 
Si bien es una modalidad muy cómoda, la compra por internet también tiene una desventaja importante en cuanto a la logística, ya que hay mucha demora en el envío y entrega del producto, y tiene un alto costo en nuestro país. “Esto desalienta en parte la compra por internet y favorece a la tienda física”, agrega Safadi. 

A futuro
Safadi considera que la venta por internet crecerá de manera exponencial en los próximos años y las tiendas físicas pasarán a ser un showroom donde la gente sólo vaya a ver la mercadería y después terminar comprando por la web. “Debemos estar preparados para ofrecer ese servicio”, sostuvo. No obstante, agrega que se puede hacer frente a este avance del e-commerce mejorando la atención al cliente, capacitando cada vez más al personal pero también adaptándose a la nueva modalidad. “Hacia allá vamos. Igual no van a desaparecer las tiendas físicas. Podrán verse disminuidas y transformadas pero no creo que el cambio sea algo inminente y brusco. Hay una cuestión generacional en este tema”, remarcó.