Si bien el juego debe ser medido y supervisado, hay algunos datos positivos sobre su uso moderado, según informan distintas fuentes vinculadas a cómo abordar integralmente el tema de los videojuegos:

1. Fomentan el trabajo en equipo.
Las partidas multijugador tienen un objetivo común, lo que refuerza y estimula la capacidad para resolver problemas de forma conjunta o colaborativa.

2. Mejoran la capacidad de respuesta.
La capacidad de respuesta se agiliza gracias a que los jugadores se enfrentan a situaciones o problemas imprevistos, que necesitan resolverse en un tiempo establecido y limitado.

3. Estimulan la creatividad, la atención y la memoria visual.
Al enfrentarse a puzzles o rompecabezas en los diferentes niveles de un videojuego, los jugadores tienen que concentrarse, usar la imaginación y recordar los detalles con mucha precisión para poder resolverlos y avanzar en el juego.

4. Mejoran la estrategia y el liderazgo.
Muchos videojuegos tienen diferentes roles que cumplir dentro de la trama o historia. Al poner a un jugador/a en un rol de líder o en una situación de mando, estamos ayudando a mejorar su capacidad para resolver conflictos, a dirigir a otros personajes y a tomar decisiones importantes.

5. Ayudan en el aprendizaje de Idiomas
Esto se da gracias a las instrucciones en pantalla, los chats “in game” para comunicarse con otros jugadores, o la propia narración de la historia, que muchas veces al día de hoy, no están traducidas del inglés o japonés al español.

6. Estimulan significativamente el hipocampo
Los videojuegos modernos en 3D (tres dimensiones), donde existe la exploración de mundos virtuales vastos y visualmente estimulantes, pueden proporcionar una estimulación significativa del hipocampo humano. Recorrer estos mundos virtuales, requieren el uso de procesos cognitivos como: El pensamiento visual, espacial, emocional, motivacional, atencional, crítico, de resolución de problemas y memoria de trabajo.

7. Mejoran la lectura de chicos y chicas con dislexia
Los videojuegos de acción pueden ayudar a mejorar la velocidad de lectura sin pérdida de precisión. Los videojuegos resultaron igual o mejores que los tratamientos tradicionales que suelen ser más lentos y no tan divertidos.

8. Mejoran el procesamiento mental de la información
El siguiente estudio concluye que al jugar videojuegos hay un efecto causal en la mejora cognitiva y perceptiva humana.

Para que padres y madres tengan en cuenta:

• Leer y conocer el sistema ESRB.
Es una clasificación de videojuegos por edad, que orienta a los padres sobre los juegos recomendados según el rango etario. Cada videojuego tiene impresa su clasificación.

• Revisar el contenido de los juegos.
Tener control sobre el tipo de videojuegos a los que dedican tiempo nuestros hijos/as.

• Fomentar el uso de videojuegos colaborativos con amigos.
Cuando los niños juegan junto a otros socializan. Tratar de evitar que los videojuegos sean “solo” algo solitario.

• Establecer límites de tiempo.
Hay que establecer reglas. Hoy en dia hay muchos controles parentales que los padres podemos usar en las plataformas de juego más conocidas y ajustar a las rutinas de cada familia. (Playstation de Sony, Xbox de Microsoft, Switch de Nintendo, también sistemas de Apple y Google)

• Seguir las recomendaciones de los fabricantes de videojuegos.
Hacer un corte o break cada cierto tiempo de juego. No jugar completamente a oscuras. Regular el volumen de los auriculares, no jugar antes de dormir, etc

• Involucrarse más y mejor con los videojuegos.
No solo alcanza con revisar si los juegos son violentos para su edad o si cumple con las recomendaciones ESRB antes mencionadas. También implica tener más empatía con actividades que son muy importantes para nuestros hijos. Lo que para nosotros puede ser algo menor y sin importancia (ej: una construcción en Minecraft o la decoración de una casita en Roblox) para ellos puede llegar a tener mucho valor. Conectar como padres con sus creaciones puede ser una experiencia muy enriquecedora.