En un contexto donde la sustentabilidad se vuelve un tema central, el Gobierno de Córdoba ha tomado un paso decisivo en la gestión de residuos sólidos urbanos. Encabezada por el gobernador Martín Llaryora, la reciente entrega de $1.500 millones a 43 municipios y 4 entes regionales marca el inicio de una nueva etapa para el tratamiento de residuos en la provincia.

El objetivo principal de esta inversión es fortalecer los Centros Ambientales en las localidades beneficiadas. La adquisición de nueva maquinaria, como chipeadoras, prensas y trituradoras, permitirá optimizar los procesos de reciclaje y reducir la acumulación de desechos en basurales a cielo abierto. Este esfuerzo se enmarca en el Programa de Fortalecimiento de las Buenas Prácticas de la Economía Circular, impulsado por el Ministerio de Ambiente y Economía Circular, y busca posicionar a Córdoba como referente en materia de sustentabilidad.

Un esfuerzo conjunto para el ambiente

Durante el acto de entrega, Llaryora destacó la importancia del trabajo mancomunado entre la Provincia y los municipios. “No se trata de partidos, sino de proteger el ambiente y combatir los efectos del cambio climático”, afirmó el gobernador, haciendo un llamado a la unión de todas las fuerzas políticas en este desafío.

El financiamiento proviene del Fondo Ambiental, gestionado por el Ministerio de Gobierno, y es el resultado de una colaboración entre la Provincia, que aporta el 70%, y los municipios, responsables del 30% restante. Este esquema colaborativo permite a las localidades avanzar en la cicatrización de basurales, mejorar las condiciones laborales de los recuperadores urbanos y generar empleo verde, un concepto que cobra relevancia en la transición hacia una economía más amigable con el medio ambiente.

Más fondos para una mayor expansión

Uno de los anuncios más esperados fue la ampliación del programa. Llaryora confirmó la asignación de $2.800 millones adicionales para extender la iniciativa a más localidades en la provincia. El objetivo es sumar más líderes comprometidos con la defensa del ambiente, sin importar su afiliación política. “Córdoba necesita más líderes que se sumen a este esfuerzo. No me importa el partido, sino la convicción de cuidar el planeta”, expresó el gobernador.

Este fondo adicional permitirá no solo continuar con el mejoramiento de la infraestructura, sino también ampliar la capacidad de los centros de tratamiento de residuos. El plan incluye la creación de nuevas plantas de separación y la adecuación de las existentes, así como el relevamiento de basurales que aún persisten en diferentes puntos de la provincia.

Educación y empleo verde como ejes principales

Otro de los aspectos destacados del programa es su enfoque en la educación ambiental. A través de una plataforma digital, el Ministerio de Ambiente y Economía Circular capacitará a los equipos técnicos de los gobiernos locales en buenas prácticas de gestión de residuos y economía circular. Esta capacitación, junto con la implementación de manuales de referencia, busca estandarizar los procesos en toda la provincia, fomentando la separación en origen y el compostaje domiciliario.

La creación de empleo verde es otro de los pilares fundamentales de este plan. Con la mejora en la gestión de los residuos, se abrirán nuevas oportunidades laborales para los recuperadores urbanos y otros actores de la cadena de reciclado. Este modelo no solo promueve la generación de empleo, sino que también contribuye al desarrollo de una economía más sostenible y competitiva en Córdoba.

La economía circular como modelo de futuro

La ministra de Ambiente y Economía Circular, Victoria Flores, subrayó la importancia de este programa para el futuro de la provincia. “El ambiente no tiene jurisdicciones, es un problema de todos. Si no lo abordamos de manera regional, el impacto seguirá siendo negativo”, afirmó, destacando la necesidad de un enfoque colectivo y descentralizado en la gestión de los residuos.

Además, Flores resaltó que la economía circular no solo tiene beneficios ambientales, sino también económicos. Al transformar los residuos en insumos valiosos, se potencia el desarrollo local y se promueve una producción más eficiente y sostenible. “Este modelo genera empleos, es productivo, y debemos ocuparnos de cómo gestionamos los residuos para que quienes viven de esta actividad puedan tener insumos de calidad”, explicó.

Por su parte, el ministro de Gobierno, Manuel Calvo, reafirmó el compromiso de la Provincia con la agenda ambiental. “Cuidar el ambiente es un derecho y un deber de cada uno de nosotros”, señaló, destacando el carácter federal y participativo de este programa que busca mejorar las condiciones ambientales en todo el territorio provincial.

Intendentes y comunas, claves en la implementación

El éxito del programa también depende del compromiso de los intendentes y jefes comunales. Durante el acto, varios de ellos destacaron el apoyo constante del Gobierno provincial. Rubén Dagúm, intendente de Almafuerte, agradeció la pluralidad del programa, que incluye a representantes de todas las fuerzas políticas. “Los partidos se dejan de lado cuando tenemos un objetivo claro para mejorar”, afirmó.

Franco Suárez, intendente de Sampacho, destacó que el acompañamiento de la Provincia es fundamental para abordar un problema de esta magnitud. “Los intendentes solos no podemos resolver este desafío, pero juntos podemos lograrlo”, concluyó.

Con este programa, Córdoba se posiciona a la vanguardia en la gestión de residuos y en la transición hacia una economía circular, un modelo que no solo cuida el ambiente, sino que también genera empleo y desarrollo local.