Durante una entrevista reciente, Javier Rotondo, Vicepresidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), hizo una fuerte crítica sobre la situación institucional en Argentina, destacando la degradación que han sufrido las instituciones y la cultura del trabajo en los últimos años. “El mayor daño que nos ha hecho el populismo en los últimos 20 años no es económico, es institucional y cultural”, afirmó Rotondo, refiriéndose a los gobiernos que, según él, han debilitado las bases de la República.
Rotondo argumentó que la corrupción y la politización de organismos públicos como el INTA han contribuido a la degradación de la confianza pública en las instituciones. “Hubo una degradación de las instituciones en general en los últimos 20 años, y eso es algo que debemos revertir si queremos un país más justo y transparente”, señaló.
INTA y la politización de las instituciones
Uno de los ejemplos que citó fue el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), que ha sido objeto de una fuerte politización, según Rotondo. “El INTA fue colonizado por la vieja política. Se ideologizó y eso afectó su funcionamiento”, comentó. No obstante, el dirigente reconoció que la entidad tiene un historial valioso, pero lamenta que su función original se haya desvirtuado en las últimas décadas. “El INTA tiene que estar en el terreno, en el cerro Champaquí o en la Patagonia, no en un edificio en Recoleta”, agregó.
La corrupción como problema estructural
Rotondo también criticó fuertemente la corrupción como un problema estructural en Argentina, señalando que ha sido una de las principales causas de la falta de progreso. “La corrupción se ha naturalizado en muchos sectores, y eso es lo más grave. Se ha convertido en algo común, cuando en realidad no debería ser así”, dijo. Rotondo agregó que la corrupción no solo afecta a la política, sino también al funcionamiento del sector privado y al desarrollo económico del país.
“El problema es que hemos llegado a un punto en que todo se tolera, se naturaliza la corrupción, y eso es lo que más daño le ha hecho a nuestro país. Debemos cambiar esa mentalidad si queremos realmente progresar”, afirmó.
Desafíos para el futuro
Rotondo insistió en que la recuperación institucional será clave para el futuro de Argentina. “No podemos esperar un cambio profundo en el país si no reformamos nuestras instituciones. Es necesario un cambio cultural, que recupere valores como la transparencia y la honestidad”, subrayó.
Para el dirigente rural, es crucial que los ciudadanos y los dirigentes de todos los sectores asuman su responsabilidad en esta tarea. “Es fácil echarle la culpa a la política, pero todos somos responsables de alguna manera. La diferencia está en el grado de responsabilidad, y los que ocupan cargos deben rendir cuentas de sus acciones”, concluyó.